11.02.2009 09:51

Del Barça de día, del Vilanova, de noche

Sònia de Alba

Roger Rocasalbas, jugador del Vilanova l'Ull Blau, trabaja en el FC Barcelona. Lo hace la departamento de cuentas y finanzas. Pero en la pista defensa los colores de los del Garraf.

Roger Rocasalbas tiene que estar a su puesto de trabajo de lunes a viernes a las 9 de la mañana. Se trata del departamento de cuentas y finanzas del FC Barcelona. Este dato no tendría más sentido si no supiésemos que Rocasalbas milita en el Vilanova l'Ull Blau, uno de los rivales del Barça Sorli Discau en la OK Liga.

De hecho, Roger Rocasalbas fue el único jugador del Vilanova que superó a Aitor Egurrola en el partido de la 23a jornada de Liga. El delantero, que fichó este verano por el equipo que entrena Josep Lluís Del Riu procedente del Grup Clima Mataró, logró ajustar el marcador con el 2-1. Después Panadero marcó el gol final ( 3-1 ).

“A mi parecer el Palau es la cancha más complicada de toda la Liga. Es muy difícil adaptarse al parqué. Durante los primeros minutos tienes que estar más concentrado de lo normal porque te pueden sorprender”, explicó después del partido el dorsal 7 del Vilanova.

El enfrentamiento entre azulgranas y los vilanovins en el Palay es un hecho especial para Roger que, de hecho, trabaja todos los días en las oficinas del Barça, que tocan pared con pared con el Blaugrana. “Es una situación que me anima. Vivo el de día en día del club”, comenta el jugador y continúa: “También es una satisfacción jugar contra el Barça en el Palau. Disfrutas mucho.”

Cuando plega, hacia Vilanova

La jornada laboral de Rocasalbas no acaba hasta casi la media noche. Después de finalizar la tarea en el FC Barcelona, Roger se dirige a Vilanova: “Entrenamos al anochecer. Cuando salgo de trabajar, voy a jugar a hockey.” De momento, el jugador se lo combina bien. Y no valen excusas de lesiones por no llegar puntual a la oficina. “Si no tendría que pedir la baja”, sonríe y apunta que, de momento, “estoy muy contento.”

Evidentemente, la preparación de equipos como el Vilanova diverge de un equipo altamente profesional como es el Barça Sorli Discau. “Si lo hiciésemos como ellos, con unos preparadores físicos adecuados, un control individual, unas dietas correctas eso supondría un salto cualitativo”, añade Roger Rocasalbas.