El Lanxess Arena de Colonia se prepara para vivir una gran tarde de balonmano. Sin la presencia de ningún equipo alemán en la final, el público local podrá ver un enorme duelo entre el Barça Borges y el Renovalia Ciudad Real, dos equipos que se conocen, se respetan y que hoy se juegan el todo por el todo. Se reedita por tanto la final de 2005, aquella en la que Iker Romero marcó un decisivo e inolvidable gol de penalti con la cabeza vendada. Precisamente el vitoriano jugará hoy su último partido como azulgrana.

Los de Xavi Pascual pueden completar un fin de semana redondo para los aficionados azulgranas, que pueden ver como la celebración por la cuarta Champions de fútbol tiene continuidad con la octava Copa de Europa para la sección de balonmano. El equipo se encuentra a 60 minutos de la gloria europea pero antes debe superar "una final al 50 por ciento y en la que no se puede hablar de favoritos", como ayer expresaba el técnico. Los pequeños detalles, pequeños grandes detalles como la portería y la defensa, marcarán el desarrollo de la final.

Cómo llega el Barça Borges

Un año atrás, el Barça Borges caía derrotado en el Lanxess Arena en una dolorosa final contra el THW Kiel, un partido dominado durante 50 minutos que se escapó en el tramo final. Aquella fue una derrota que se arrastró en la memoria de los jugadores durante bastante tiempo y de la que finalmente hoy se puede sacar la espina. Mismo escenario, y el gran rival en la Asobal convertido en el último obstáculo europeo. 

El Barça Borges repite la convocatoria de semifinales, sin Sjöstrand, si bien Gonzalo de Vargas ya demostró contra el Rhein-Neckar Löwen que puede compensar su baja. Los azulgranas llegan cargados de moral. Es la hora. Es el momento de la verdad y el vestuario no quiere fallar esta vez.

El rival

El portero Sterbik, que no pudo jugar la semifinal contra el Hamburgo, es baja destacada en el Ciudad Real. Lo sustituirá el portero del filial Antonio Carreño. La temporada de los manchegos ha ido claramente de menos a más y en la segunda semifinal de la F4 dejó sin opciones ni más ni menos que al campeón de la Bundesliga (28-23).

El campeón de la Supercopa, la Copa Asobal y la Copa del Rey quiere evitar el doblete de un Barça Borges que ya le ha arrebatado el otro gran título, la Liga Asobal. El buen estado de forma de Lazarov, Entrerríos, Aguinagalde o el peligro siempre latente de Abalo, Kallman y compañía, propician la mejor final posible.

Las frases de los protagonistas

Xavi Pascual, entrenador del FC Barcelona Borges

"El Ciudad Real hizo un gran partido ayer, controlando muy bien al Hamburgo. Fue justo ganador. Tendremos que aprovechar nuestros puntos fuertes. Todo el mundo sabe cómo jugaremos, no engañaremos a nadie y esperamos tener un poco de suerte, que en estos partidos también es importante ".

"La reacción del público es una incógnita, veremos cómo responderá ahora que no hay equipos alemanes. Pero siempre que jugamos contra el Ciudad Real, sea en casa o fuera, puede pasar de todo".

Viran Morros, jugador del Renovalia Ciudad Real

"Hicimos el partido que queríamos hacer en semifinales. Defendiendo y teniendo contras. Creo que fuimos mejores que el Hamburgo y me alegro de que sea una final entre equipos de la Asobal. Creo que no hay favorito".

"Espero una final durísima, como siempre que nos encontramos con el Barça. Es uno de los mejores equipos de Europa, esta temporada están muy sólidos, con Saric en gran estado de forma. Pero no podría elegir qué jugador me gustaría que no estuviera: tiene grandes jugadores, tanto en ataque como en defensa. Rutenka, Rocas, Ugalde, Víctor, Jernemyr ...".