El partido ha comenzado con el ofrecimiento del título de la Minicopa que el equipo Cadete consiguió en Vigo con motivo de la Copa del Rey. Precisamente en esa competición, el Cuatro Rayas Valladolid fue el verdugo del Barça Borges en las semifinales. Aquella derrota seguro que no la han olvidado los jugadores azulgranas, mentalizados para no cometer los errores que los apartaron de la final del torneo del KO. El resultado: victoria justa tras una excelente segunda mitad, sobre todo en defensa.

Mejores defensas que finalizaciones

El Cuatro Rayas de Juan Carlos Pastor, un equipo en clara línea ascendente las últimas semanas, ha salido con ganas de repetir proeza en el Palau. De la mano del internacional Perales, dueño y señor del ataque castellano, los visitantes se han adelantado 2-4 en un inicio de ritmo elevado en ambos lados, pero la máquina azulgrana no ha tardado en ponerse en marcha, contestando con un parcial de 4-0.

Juanín empezaba a causar estragos a la contra. Y es que el duelo del leonés ante el extremo del Valladolid Víctor Alonso ha sido una de las mejores alegrías del primer tiempo. Ambos han llegado al descanso con 5 goles, siendo los principales finalizadores de cada equipos, si bien la balanza global se ha decantado a favor de los azulgranas, más acertados en defensa ante un Valladolid a ratos descolocado. Jernemyr, una vez más, ha estado a un nivel enorme.

El Barça Borges ha llegado al final de los primeros 30 minutos cuatro goles por encima (16-12), la máxima renta conseguida hasta entonces. Las intervenciones de Saric, que ha sustituido a Sjöstrand ecuador de la primera mitad, también han levantado el Palau en un primer tiempo marcado por el buen tono general pero de mejor defensa que no ataque.

Superando la máxima diferencia histórica

En la reanudación, los azulgranas han recuperado el olfato y han abierto rápidamente una brecha definitiva (23-15). El Barça Borges castigaba las precipitaciones visitantes y también algún atrevimiento excesivo de Pastor con el portero jugador. Saric, que cada vez se encuentra más cerca de su mejor nivel, ha vuelto a regalar intervenciones marca de la casa. En definitiva, el conjunto de Xavi Pascual ha sentenciado a su rival con las virtudes de toda la temporada.

Con el partido roto y justo después de un golazo de rosca de Noddesbo (26-17), Juan Carlos Pastor ha dado entrada a Svensson. El ex azulgrana se ha llevado la merecida ovación de la grada, aunque no ha podido cambiar un guión ya escrito. Saric seguía siendo un muro y el Barça Borges ha igualado, con 17 minutos por jugar, la máxima diferencia histórica en el Palau ante el Valladolid: +11 (temporada 92/93).

Iker Romero se ha apuntado a la fiesta con un gran segundo tiempo a nivel individual, pero la paliza se ha conseguido a partir del juego de conjunto y, sobre todo, de una sólida defensa, argumentos para soñar con la victoria contra el Kiel en la Liga de Campeones. En la competición doméstica, la de este martes ha sido la 26ª victoria en 26 jornadas. El camino azulgrana en esta Liga Asobal sigue siendo inmaculado y cada vez está más cerca un título bien merecido. La sentencia matemática podría llegar el próximo martes en el Quijote Arena, la pista del Ciudad Real.