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27.12.2008 19:37

A la final (26-23)

Meritxell Infante

Después de imponerse al Ciudad Real por 26 a 23, el Barça Borges disputará la final de la Copa Asobal en el Palau Blaugrana. Los de Manolo Cadenas han hecho suyo un partido que han salido a ganar con entereza y orgullo.

Era el momento de devolverle al Ciudad Real la derrota de Liga en casa y la semifinal de la Copa Asobal ha sido el momento idóneo. Los hombres de Manolo Cadenas se han llevado la victoria ante los manchegos en un partido mucho más igualado que el anterior. Los azulgranas han confiado en sus posibilidades y han dominado el partido sin perder los nervios en los momentos más enloquecidos del enfrentamiento. Ha sido una victoria de equipo con bastante rotación en el banquillo azulgrana, teniendo en cuenta que el día siguiente se podía estar jugando la final, la primera después de cinco años y, además, en casa.

Iker Romero, con molestias a la rodilla derecha, era uno de los descartados en el último momento, junto con Losert y Putics. Los que han jugado lo han hecho con la suficiente entrega y el mayor acierto goleador ha llegado desde los seis metros, con Ugalde y Rocas, y desde el punto de penalty, con Hansen, tres de tres desde los 7 metros.

Momentos de indecisión

En la primera parte ninguno de los dos equipos acababa de llevarse el partido a su terreno. Pérdidas de balón y lanzamientos a portería sin decisión mantenían un marcador flojo para dos equipos de tanto potencial. Los azulgranas han tomado la iniciativa y han estrenado el electrónico con un 2-0 que los ponía por delante. Del minuto 6 al 13 se han vivido unos minutos de imprecisión total y ninguno de los dos equipos ha sido capaz de transformar ningún lanzamiento en gol, en parte también por el acierto de Barrufet y Sterbik en la portería. El Ciudad Real rompía esta dinámica negativa con el empate a 4 (min.13).

Golpe de efecto de Ugalde

Cuando parecía que ninguno de los dos equipos se llevaba el partido, el Barça Borges ha marcado la diferencia a la contra. Tres goles de Cristian Ugalde, que ha sacado la rabia, y uno de Tomás daban un parcial 4-1 en los últimos minutos antes del descanso, al que se llegaba con el 13 a 10 en el marcador. Los dos jugadores, formados en la casa, reivindicaban su derecho a jugar esta final, de un título que aún no tienen. Ugalde ha sido el máximo goleador azulgrana con cinco goles.

El público se calienta

En la segunda parte, el Ciudad Real ha salido con la intención de continuar en el partido pero no ha sido capaz de sorprender a los azulgranas. Ya a los tres minutos de la segunda parte los azulgranas marcaban la máxima diferencia del partido, que sería de cuatro goles (16-12). A pesar de la presión a los árbitros y las protestas –Hansen ha tenido que repetir el lanzamiento de un penalty que ya se había dado por bueno-, los hombres de Cadenas no se han descentrado y han continuado dentro del partido. El público del Palau se ha calentado más en la segunda parte y ha ayudado a los azulgranas a consolidar su dominio en el marcador.

Mano firme en la recta final

Jerome Fernández desde los 9 metros, con cinco goles, todos en la segunda parte, era el principal poder ofensivo de los manchegos, que no han conseguido acercarse a más de dos goles del Barça Borges. A pesar de que Steffanson ha marcado el 25 a 23 a tres minutos del final, con aún margen de recuperar el marcador, los azulgranas han aguantado y han sentenciado con un gol final de Rocas que cerraba la victoria azulgrana.