Si alguien estará contento de tener como compañero a Sergio Lozano estos son Cristian Domínguez y Paco Sedano. No sólo porque los tres son madrileños, sino porque los porteros del Barça Alusport han tenido que sufrir de lo lindo la potencia y el carácter del nuevo fichaje blaugrana. "Se me da bien el Barça, la verdad es que sí", reconocía hace unas semanas el jugador madrileño, a las puertas de la final de Liga. Y ciertamente, Lozano ha sido un quebradero de cabeza para los de Marc Carmona en las tres temporadas que hace que juega en División de Honor. Aparte de los cinco partidos de la final, Lozano se enfrentó siete veces al Barça y le marcó un total de ocho goles.

Debut con gol en el Palau Blaugrana

El año de su debut en División de Honor, Lozano marcó en el empate de Cartagena (2-2) en el Palau, escenario donde repitió la temporada siguiente, aunque esta vez no le sirvió para evitar la derrota de su equipo (6-3). Esa misma temporada 2008/09 estuvo punto de dejar fuera a los azulgranas de la Copa de España con dos grandes goles, y en la Liga abrió el triunfo de su equipo con un gol prácticamente imposible (2-1).

Vistiendo la camiseta de Caja Segovia, en calidad de cedido por el FC Barcelona, Lozano hizo trabajar mucho a los porteros azulgranas, especialmente a un Cristian con quien tuvo un duelo para recordar. En el partido de la fase regular jugado en el Pedro Delgado, el cierre marcó un gol de penalti, pero sin la magistral actuación de su portero el Barça Alusport no se habría llevado la victoria (2-3) y Lozano habría marcado algún gol más .

En la Copa de España, el ya jugador azulgrana levantó un partido que los azulgranas tenían en el bolsillo con una gran acción personal, y en la agonica tanda de penaltis, demostró que la presión no puede con él. Lozano se perdió el partido de Liga en el Palau a causa de unas molestias físicas.

Un gol en la gran final

En la serie final por el título de Liga, Sergio Lozano sólo marcó un gol, en el cuarto partido de la serie, pero su presencia fue majestuosa en los cinco encuentros. Y para el recuerdo quedará un disparo al palo en el último segundo del segundo partido, que pudo cambiar completamente la serie. Quién sabe si ese día quedó demostró que estaba predestinado a jugar y triunfar en el Palau Blaugrana.