Una trayectoria meteórica, brillante e incontestable. El Regal Barça celebró el título de la Copa del Rey con una exhibición de baloncesto y afrontando retos tan difíciles como exigentes. Los hombres de Xavi Pascual levantaron la Copa 2010 en Bilbao, el tercer título consecutivo de la temporada tras la Liga Catalana y la Supercopa ACB.

El primer equipo de baloncesto llegó a Bilbao con ganas de demostrar que la línea de juego era fruto de un trabajo global de un esfuerzo colectivo. Con el apoyo de la afición que apoyó al equipo en el Bizkaia Exhibition Center-escenario de la Copa-, los azulgranas no decepcionaron. Primero, en un partido duro contra el Cajasol, se logró el acceso a la semifinal. Después, el Regal Barça superó otro escollo, el Power Electronics Valencia, y el último paso a dar era derrotar al eterno rival, el Real Madrid. Los blancos pudieron hacer poco para responder a un Barça letal que ganó por 80-61.

Factor ambiente

La fase final de la Copa de Bilbao contó con un grueso importante de aficionados azulgranas que se desplazaron a Bilbao. Precisamente, el conjunto de Fotsis Katsikaris ha aprovechado el apoyo de su afición en el play-off. Y el Regal Barça necesita la misma fuerza para derrotar a un equipo "extraordinariamente difícil", según Roger Grimau: "Porque son buenos y porque ahora están en ese punto que quieren. Tienen un punto extra por todo lo que están haciendo. Será muy difícil, de verdad ".

Por eso, más que nunca, hay que ganar los dos partidos en el Palau. "Estos dos primeros partidos son importantísimos. Lo hicimos bien contra el Caja Laboral, y para la final creo que son, incluso, más importantes ", asegura el capitán azulgrana.