La visita al Nou Congost es difícil mentalmente. Y es que aparcar la Euroliga unas horas para centrarse en la ACB no es nada sencillo. Y aún lo es más contemplando los precedentes que han tenido los azulgranas en Manresa. "Si jugáramos en otra Liga el partido quizá sería fácil pero en la ACB no hay rival asequible", asegura Roger Grimau. Por ejemplo, en la Liga griega el próximo partido que tiene el PAO es en la pista del Panionios el 3 de abril.

El capitán azulgrana, como el resto del equipo, se han vuelto a vestir de corto. El último entrenamiento antes del partido ante el Assignia Manresa ha servido para ultimar detalles y para tener claro que muchos de los errores cometidos en el segundo partido ante el Panathinaikos fueron propios: "Esta es la lectura positiva. Perdimos porque fallamos nosotros más que por méritos de ellos, que también hicieron ".

Respecto al Manresa, Grimau tiene claro que será complicado: "Es un derbi catalán y siempre motiva más. Además, el Assignia Manresa no está tan necesitado de victorias como otras temporadas pero ganar a un grande como el Regal Barça siempre añade encanto ".

Manresa y las prórrogas

Los últimos partidos jugados en el Nou Congost han sido taquicárdicos. Si la temporada pasada el Regal Barça superó a los de Jaume Ponsarnau tras una prórroga por 82-87, hace dos temporadas la emoción duró ¡60 minutos! 40 del tiempo reglamentario y cuatro prórrogas para un resultado final de derrota azulgrana de 122-117.

Ante una semana tanto o más intensa que esta quizás no es aconsejable que el partido sea muy intenso, por el desgaste físico que supondría. Pero "yo ya firmo si acabamos como la temporada pasada", recuerda Grimau. Y es que hace dos temporadas los azulgranas accederieron a la Final a Cuatro de Berlín después de las cuatro prórrogas año pasado también se clasificaron para la final de la Euroliga de París tras derrotar al Manresa con un tiempo extra .