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07.09.2008 15:59

El diario de Víctor Sada (III)

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El primer equipo de baloncesto está apunto de completar la tercera semana de la pretemporada. Ahora los jugadores ya comienzan a notar el trabajo acumulado. Y es que durante el stage en Encamp (Andorra) es cuando el equipo fuerza la marcha.

“Para mucha gente el sábado significa un día de fiesta después de haber estado trabajando durante la semana. Para ellos significa descanso y tiempo libre para poder disfrutar con los amigos o con la familia de las actividades de tiempo libre. Para nosotros no es así. La verdad es que durante la pretemporada nunca sé en qué día estamos. Como que hacemos sesiones dobles y normalmente es fuera de Barcelona me costa saber el día en que estamos.

Ayer volvimos a hacer doble sesión de entrenamiento, como el viernes. Hicimos la sesión de peses, la de técnica individual por posiciones y, por la tarde, un entrenamiento con todos los compañeros.

Pero este entrenamiento fue un poco diferente. Roberto Dueñas nos hizo una visita y pudimos charlar un rato con él antes de empezar. Tengo mucho cariño a Roberto, con quien coincidí en mi primera etapa en el Barça y unos meses en Girona. Es un gran tipo y me hizo mucha ilusión encontrármelo en el entrenamiento!

Es curioso, el primer día del stage en Encamp fui al jacuzzi y no me encontraré a nadie. Pensé que estaría muy tranquilo pero ahora ya hay unos cuantos compañeros que, cuando acabamos el entrenamiento, pasan por la zona de aguas. Seguramente es porque comenzamos a notar la carga del trabajo.

Cuando acabó esta sesión los tres jugadores jóvenes que han compartido entrenamiento durante estos días, Alex Hernández, Mamadou Samb y Papa Abdoulaye, tuvieron que bajar a Barcelona porque tenían que jugar con el WTC Cornellà, el equipo vinculado al Barça

Ahora que me he quedado solo en la habitación hemos establecido que sea ésta la sede para jugar las partidas de póquer. Ayer ya se sumaron Jaka y Baso y tendremos que comenzar a hacer turnos para poder jugar. La verdad es que nos lo pasamos muy bien y nos reímos un rato porque el resto del equipo también pasó por la habitación para ver cómo iba la partida.”

Víctor Sada