Dicen que el debut en una competición del KO, en el que no hay margen de error, es el partido más complicado, donde los favoritos pueden sufrir un resbalón que les deje fuera de combate. El Barça Borges es consciente del peligro y también del potencial de un Ademar que no pondrá las cosas nada fáciles. Nunca lo ha hecho y esta vez no será diferente.

El vigente campeón del torneo -de hecho lo ha ganado las dos últimas temporadas- entra en escena en el pabellón As Travesas consciente de que levantar los dos últimos trofeos no le da ninguna ventaja. Todo el mundo espera un triunfo, todo el mundo espera una nueva final entre Barça Borges y Ciudad Real, y eso no ayuda. Se promete un duelo apasionante, tenso y igualado, un partido típico de torneo del KO donde los pequeños detalles pueden decidir.

Cómo llega el Barça Borges

Con el título de la Asobal muy cerca y el sorteo de la Champions aún bien presente, los azulgranas quieren centrarse única y exclusivamente en esta competición. Cinco días de mucha concentración para intentar sumar laque sería la 18ª Copa del Rey de la historia. Para ello, hay que poner los cinco sentidos en el debut y sólo pensar en el Ademar. El portero Daniel Saric es la única baja del equipo de Xavi Pascual.

El rival

A pesar de la dolorosa eliminación europea a manos del TBV Lemgo, en la Copa EHF, el conjunto leonés llega a Vigo convencido de sus posibilidades. El técnico catalán Jordi Ribera tiene la duda del portero croata Venio Losert, lesionado los últimos partidos si bien bastante recuperado, y recupera una pieza importante como es Vega.

Ribera considera el Barça Borges un equipo "con hambre de títulos y plantilla suficiente para aspirar a todo" pero confía en que sus jugadores puedan repetir el buen trabajo de la Copa Asobal. "Se trata de intentar gestionar mejor el aspecto físico y llegar mejor a los minutos finales, pero antes hay que repetir las virtudes que hemos tenido cuando nos hemos enfrentado al Barça", expresó. Una de estas virtudes es el contraataque, aunque también hay que estar muy atento a los recursos del joven Montoro o al peligro de Martin Stranovsky, máximo goleador del conjunto leonés.