El Barça Alusport ha perdido la primera plaza de la competición, que pasa a manos de El Pozo de Murcia. Es la peor noticia de un buen partido, trabajado y en el que el equipo azulgrana ha merecido más premio. Un punto agridulce pero que no desvía al conjunto de Carmona de la buena línea de juego que está demostrando esta temporada. La segunda mitad, una vez más, merecía más premio.

Inicio frenético

Y es que el partido ha sido exactamente como se ha dejado intuir en los primeros minutos. Un enfrentamiento entre dos grandes equipos que, diga lo que diga la clasificación, no son tan diferentes. Si bien es cierto que el Barça Alusport es sensiblemente superior, con más fundamentos de campeón, ninguno de los dos han renunciado a buscar el gol y los primeros minutos han deparado ocasiones a ambos lados. Las mejores: dos francos remates del capitán local Rubén y una tercera del veterano Óscar Redondo por parte del Santa Coloma, y ​​claras oportunidades de Fernandao y Saad para los azulgranas.

El conjunto de Carmona hacía daño a partir de su juego entre líneas y la facilidad con la que encontraba los pases de pivote mientras que los de Plaza, con un juego más directo, amenazaban la portería azulgrana. Los colomenses sólo encontraban un pero a su buena actuación, un pero vestido de amarillo y llamado Cristian. Tanto el madrileño como su homólogo de Marfil, Igor, han cogido pronto el protagonismo con excelentes intervenciones.

El partido caminaba con incertidumbre e igualdad, hasta que apenas pasado el ecuador del primer tiempo, un lanzamiento de falta de Rubén ha supuesto el 1-0. La respuesta azulgrana ha sido inmediata, pero el travesaño y el portero Igor han evitado dos dianas cantadas de Lin.

Empate afortunado pero merecido

Lo cierto es que Marfil, con ventaja en el marcador, ha dejado de tener presencia en ataque. La necesidad de puntos y el desgaste defensivo lo han provocado, pero de rebote han forzado un dominio azulgrana que ha acabado culminando en el empate. Eso sí, en la opción menos clara. El gol más feo, todo sea dicho, tiene el mismo valor. Torras ha servido un córner y un defensa local ha desviado el balón a la red.

El primer tiempo ha acabado con una sensacional parada de Cristian a pies del gigante Esteller y una cierta sensación general de que el Barça Alusport estaba muy presente en el partido y volvía a tener las de ganar. Fernandao ha alimentado esta sensación con un doble aviso nada más comenzar. Los intentos azulgranas eran constantes y parecía que el gol no tardaría en llegar. 

Marfil no se acercó a los dominios azulgranas hasta los cinco minutos, cuando nuevamente Esteller ha hecho valer su cuerpo para encontrar espacio de disparo y encontrar respuesta a Cristian, que ha repetido intervención brillante unos segundos después a falta peligrosa de Jordi Sánchez. Con la seguridad habitual que da el madrileño bajo palos, el Barça Alusport ha superado el bache y ha vuelto a acosar la portería rival. Los árbitros han evitado un gol de Javi Rodríguez no dando la ley de la ventaja cuando el capitán estaba a punto de marcar a puerta vacía. Y el mismo Javi ha tenido una nueva clara ocasión que esta vez ha salido fuera por los pelos.

Un Barça Alusport valiente

La quinta falta con diez minutos por jugar añadió presión a los de Carmona, que no podían cometer ningún error en defensa si no querían recibir algún doble penalti en contra. Pero el dominio era ya abismal ante un rival que empezaba a acusar el desgaste.

Pero pasaban los minutos y el cara o cruz ha sido inevitable. En este desenlace, con las fuerzas muy justas, dos puntos a ganar y uno a perder, Carmona se ha mostrado muy valiente y ha sacado el portero jugador a tres minutos del final. Javi Rodríguez, vestido de color mango, ha otorgado superioridad a los azulgranas, que han rozado el gol en varias ocasiones. Igor ha vuelto a evitar la victoria con un pie salvador. Al final, un punto por equipo que no satisface a nadie y que tampoco hace justicia.