27.09.2010 18:00

Regreso agridulce de Unzué

Jaume Marcet / Aida Soriano

Contra el Barça B, el entrenador del Numancia, Juan Carlos Unzué, vivió emociones contrapuestas: la alegría por el reencuentro con viejos conocidos como Luis Enrique y la impotencia por la derrota a manos del filial azulgrana.

Abrazos, breves conversaciones a pie de campo y alegría. Esto fue lo que pudo vivir Juan Carlos Unzué, ex preparador de porteros del Barça durante siete temporadas y actual entrenador del Numancia, antes de empezar el partido del pasado domingo contra el filial. Unzué se saludó con diferentes miembros del cuerpo técnico del Barça B como Luis Enrique, Joan Barbarà o el preparador físico José Ramón Callén y también habló, entre otros, con Rubén Miño y Oier Olazábal, los dos porteros del filial convocados para enfrentarse al equipo soriano.

Inicio de liga complicado

Este pasado domingo, Unzué volvió a la que fue su casa como jugador durante dos años y donde pasó siete temporadas como entrenador de porteros acompañando a Rijkaard y Guardiola. Siempre bajo palos, este nuevo curso Unzué ha dejado los guantes para ejercer de técnico del Numancia. De momento, sin embargo, su equipo sólo ha sumado tres puntos en cinco partidos: ha ganado al Cartagena (2-0) y perdió contra Rayo Vallecano (3-2), Celta (1-3), Xerez (1-0) y en la última jornada contra el Barça B (1-0) .

Satisfecho con la actitud de los suyos

Ante el filial, Unzué se sentó en el banquillo visitante del Miniestadi embargado por una especie de tranquilidad y sobriedad que poco a poco se convirtió en impotencia y nervios ante la imposibilidad de puntuar. "La intención era dividir la posesión, no era una tarea fácil y no será porque mis jugadores no lo hayan intentado", afirmaba Unzué en la rueda de prensa posterior al encuentro contra el Barça B. "La actitud ha sido fantástica, hemos intentado incomodarles lo máximo posible, que ellos no hicieran su juego. La presión nos ha dado la posibilidad de crearles dudas, de robar el balón, pero nos ha faltado un poco de definición", explicaba el míster del Numancia.

Convencido de poder mejorar

A pesar de la derrota del equipo soriano en el Miniestadi, Juan Carlos Unzué extrajo conclusiones esperanzadoras del encuentro: "Lo importante es que los jugadores se convenzan de que son capaces de dificultar el juego al mejor equipo de la categoría con el balón". Y concluyó convencido: "Sé que les exijo un gran esfuerzo físico que condiciona la definición y que tenemos mucho margen de mejora con el balón en nuestros pies, pero sé que esto es un proceso largo y que poco a poco lo conseguiremos".