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30.12.2009 16:09

Buenos precedentes en el primer partido del año

David Puig

Al Barça se le da bastante bien el inicio del nuevo año, al menos en las diez últimas temporadas en las que ha ganado siete de los diez partidos disputados. Con todo, estos son partidos que ofrecen más dificultades de las previstas.

El primer partido después del paréntesis navideño es uno de los más temidos por todos los entrenadores y en el caso del Barça no es una excepción aunque las estadísticas puedan indicar lo contrario. La inactividad de las vacaciones navideñas y la falta de tensión competitiva suelen pasar factura. El Barça está bien avisado ya que aunque el balance es positivo en los primeros partidos del año nuevo, ha sufrido más de un susto que obliga a tener a punto todas las alarmas.

Año nuevo ... y derrota en el Madrigal

El Villarreal ya sabe lo que es ganar al Barça en el primer partido del año. El 9 de enero de 2005, el equipo de Manuel Pellegrini goleó por 3-0 al Barça de Frank Rijkaard en el partido de la 18 ª jornada de Liga. Fue una de las cuatro derrotas que encajó el Barça aquella temporada en la que acabó proclamándose campeón de Liga.

El equipo acusó el mini stage que hizo en Peralada pero que le sirvió para llegar en un óptimo estado de forma al tramo final del campeonato. Forlán, en dos ocasiones, y Javier Rodríguez, fueron los goleadores del “submarino amarillo”.

Invencibles en casa

En estas últimas diez temporadas, el Barça ha dado la bienvenida al nuevo año en el Camp Nou en cinco ocasiones, cuatro de ellas en partidos de Liga y otro de la Copa del Rey, con un balance de cuatro victorias y un empate. Las víctimas han sido el Mallorca (3-1, temp, 08-09), Recreativo de Huelva (3-1, temp. 2002-03), Zaragoza (2-0, temp. 2001-02) y Real Sociedad (3 -1, temp. 1999-00), todos en partidos de Liga.

El único tropiezo fue en la Copa del Rey. Fue el 2 de enero de 2008 en el partido de vuelta de los 1 / 16 de final ante el Alcoyano. El marcador fue de empate a dos goles. El resultado no tuvo trascendencia ya que en la ida, el Barça había dejado encarrilada la eliminatoria con un 0-3.