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30.06.2010 18:15

Ricky, una estrella más en el Campus

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Los chicos y chicas del campus de verano del FC Barcelona han recibido la visita de Ricky Rubio. El base de El Masnou ha compartido el día con los jóvenes, ha atendido sus preguntas y, por supuesto, ha jugado a baloncesto con ellos.

Si anteriormente habían sido Roger Grimau o Victor Sada, este miércoles ha sido el turno de Ricky Rubio. El carismático base ha hecho las delicias de los más pequeños en su visita al campus de baloncesto que el FC Barcelona organiza estos días en la localidad de Santa Maria de Palautordera.

Ricky asegura que, si los jóvenes jugadores se lo pasan en grande, él no es menos: "Hace ya 2 años que empecé a venir a campus de este tipo con niños, hasta entonces era un participante más . La verdad es que estoy muy contento porque compartir un día con los niños es muy divertido y me lo paso tan bien como ellos ".

Turno de preguntas

En una peculiar "rueda de prensa", el jugador del Masnou ha podido responder a las preguntas de los pequeños jugadores de baloncesto, que aprovechan para hacer de periodistas cuando tienen una estrella como Ricky a su alcance. Ricky ha respondido a preguntas asequibles como cuáles son sus jugadores favoritos -ha dicho que le encantan su compañero de equipo Navarro y el americano Chris Paul, de los Hornets-... y alguna de más complicada como cuáles son los pabellones más hostiles en los que ha jugado. En este sentido, Ricky sólo dice que no olvida el del Partizan, el Pionir de Belgrado, una auténtica olla a presión por el fantástico ambiente que se genera en cada partido.

Los pequeños, encantados

Después de las preguntas llega el momento más dulce para los jugadores: compartir pista con la estrella. Tras varios ejercicios de tiro y bote, los pequeños valoran la presencia de Ricky en el Campus. Los niños destacan el trabajo del crack azulgrana, un elemento imprescindible para llegar a lo más alto.

Los pequeños saben de su juventud y el pedazo de jugador que está hecho pero recuerdan que el talento, sin trabajo, no es suficiente.

A todos ellos, el hecho de tenerle por primera vez delante es una de las cosas que más les impresiona. A algún participante incluso se le escapa un "me lo imaginaba más alto".