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10.05.2010 12:51

La alegría del campeón

Sònia de Alba (enviada especial)

El Regal Barça celebró en París su segunda Liga Europea. Lo hizo con la familia y los amigos y todas aquellas personas que han apoyado al equipo azulgrana.

La fiesta duró hasta la madrugada. En el hotel donde se alojaban los familiares de los jugadores y el grueso de seguidores azulgranas en París, el Regal Barça pudo celebrar la Liga europea y compartir con todos aquellos que le han acompañado en esta gran cita francesa el segundo título de la sección azulgrana.

La plantilla campeona de Europa llegó a este punto de concentración hacia la una y media de la madrugada. Allí les esperaban sus mujeres, padres y madres, hijos, hermanos y muchísimos amigos.

Parte de la junta directiva así como los patrocinadores no se perdieron este evento, como tampoco Xavi Hernández, el jugador del primer equipo de fútbol, que se quedó en París con algunos amigos. Hay que recordar que otros jugadores de la primera plantilla, Bojan Krkic, Gerard Piqué, Carles Puyol y Sergio Busquets, estuvieron presentes en el París-Bercy para animar al Regal Barça, pero todos estos tomaron un vuelo hacia la medianoche de regreso a Barcelona.

Los jugadores y el entrenador, una gran piña

Ganar una Copa de Europa no se consigue cada día y, evidentemente, las caras de alegría eran la moneda de cambio en abrazos, besos y saludos a granel que recibieron los jugadores.

Pero este equipo también transmite hermandad y conjunción. El Regal Barça, desde el primer jugador hasta el último, desde el entrenador hasta sus ayudantes y desde el médico hasta al encargado de material destilaban unión. Todos fueron partícipes de la fiesta, cantando y bailando. Jordi Trias y Ricky Rubio se encargaron de calentar el ambiente y de pedir las canciones al disco-jockey, pero el relevo lo fueron tomando casi todos los demás en un ambiente de alegría y, por encima de todo, de unidad.