01.11.2009 12:39

El clásico, favorable al Puigcerdà (7-5)

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El FC Barcelona de hockey hielo se ha encontrado un bache en el camino hacia la consecución del título de Liga. Este sábado la competición doméstica dio el pistoletazo de salida. Los azulgranas visitaron la pista del Puigcerdà y perdieron por 7 a 5.

Los de la Cerdanya vienen pegando fuerte esta temporada. El fichaje del ex azulgrana Pablo Muñoz les está siendo más que rentable. Él mismo fue el encargado de sentenciar el partido ante el Barça con un gol en el último minuto.

Un primer tercio decisivo

Con un 3 a 1 finalizó el primer tercio. En el primer minuto de juego Pablo Muñoz ya convirtió el primero de la noche. Un minuto después Peter Kotlaric dejó el marcador en 2 a 0. El Puigcerdà había puesto la directa dispuesto a dejar el partido sentenciado en los primeros 20 minutos. En el minuto 9, Peter Filip hizo más grande la brecha con el 3 a 0. Fue Ramón Morer el que cerró la buena racha local a ocho minutos para finalizar el primer periodo (3-1). Esta diferencia de dos goles hizo mucho daño a los azulgranas que reaccionaron y se mantuvieron fuertes en la pista durante todo el partido.

Igualdad máxima

Si por algo se caracterizó el partido durante los últimos dos periodos fue por la gran igualdad entre ambos equipos. El segundo y tercer tercios siguieron las mismas directrices de principio a fin. Primer minuto y gol del Puigcerdà, parcial de 0 a 2 para el FC Barcelona y aproximación y remate final de los de la Cerdanya. Salva Barnola marcó el 4 a 1, para después dar paso a Jordi Bernet, autor de los dos goles consecutivos de los azulgranas a cuatro minutos de poner punto y final al segundo tiempo. El Barça se colocaba entonces a un solo gol de su rival (6-5), pero Peter Kotlaric ahogó la fiesta a los de Barcelona con el 5 a 3 en el último minuto.

Él mismo fue capaz de traspasar la portería contraria de nuevo (6-3) al comenzar el último tercio. De nuevo dos goles del FC Barcelona a cargo de Morer y Boberg dieron esperanzas a los de Ramón Barón. Faltaban 16 minutos para que el partido llegase a su fin y el electrónico reflejaba un 6 a 5. Pero un siempre letal Pablo Muñoz acabó con las ilusiones de su antiguo equipo a 17 segundos para el final con el séptimo para el Puigcerdà.